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INSTRUCCIONES PARA EL CUIDADO DE LOS MUEBLES
CLIMATIZACIÓN DE LA HABITACIÓN:
• La madera, cuando se corta por primera vez, contiene más del 50% de agua. Cuando
se prepara para la construcción de muebles, se coloca en un horno y el contenido de
humedad se reduce a un 8 o 10 por ciento. La madera es porosa y responde a su
entorno. Si la habitación tiene mucha humedad, la absorberá y se expandirá, y si la
humedad es baja, perderá humedad y se encogerá.
• Es importante que los niveles de humedad en la habitación se controlen para evitar
los extremos de demasiada o poca humedad. Los muebles no deben colocarse cerca
de las salidas de aire acondicionado, chimeneas, radiadores, calefactores,
humidificadores o deshumidificadores. La exposición a variaciones extremas de
temperatura y humedad puede dañar cualquier producto de madera fina.
EL ENTORNO IDEAL PARA LOS MUEBLES FINOS:
• Los muebles de madera fina tendrán menos problemas cuando su entorno esté
controlado a una temperatura de entre 65 y 75 grados y una humedad relativa de
entre 35 y 40 por ciento. La madera colocada en un ambiente fuera de esos límites
puede y se encogerá o expandirá y puede desarrollar algunas pequeñas grietas que
no son defectos materiales o estructurales.
EVITE LA LUZ SOLAR DIRECTA:
• Mantenga los muebles fuera de la luz solar directa. Los rayos ultravioleta destiñen los
colores y en algunos casos los oscurecen. También pueden causar grietas o rayas en
el acabado. Los acabados blancos amarillean de forma natural con el tiempo y la
exposición a la luz solar directa acelera este proceso natural junto con el
oscurecimiento natural de algunas maderas con el tiempo; esto no se considera un
defecto de calidad.
ALMACENAMIENTO ADECUADO:
• Si necesita guardar sus muebles durante algún tiempo, no los almacene en un sótano
húmedo o en un ático seco y caliente. Permita el movimiento de aire alrededor de los
muebles y no apile nada sobre ellos.
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